Por Efe - Agencia -
El presidente de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos en Bolivia (APDHB), Rolando Villena - Abi Agencia
LA PAZ |
El presidente de la Asamblea Permanente de los Derechos Humanos de Bolivia, Rolando Villena, denunció hoy que testigos de la masacre que se produjo en septiembre del año pasado en la región de Pando reciben amenazas por parte de los presuntos autores o involucrados en la misma.
Villena declaró hoy a Radio Erbol que los vecinos de la localidad pandina de Porvenir y las zonas aledañas que presenciaron los hechos del 11 de septiembre de 2008 "se sienten indefensos" ante las amenazas.
Por ello, indicó que los testigos de la masacre piden una mayor y más contundente presencia del Estado en la zona del conflicto.
Hasta hoy, las diversas investigaciones realizadas sobre los sucesos difieren sobre el número de víctimas que resultó de aquel choque, si bien la Cámara de Diputados estableció en marzo de este año que las víctimas comprobadas fueron trece.
Según esa investigación, nueve de los fallecidos eran campesinos y otros dos eran empleados de la Prefectura de Pando, mientras que un pastor evangélico y un soldado fallecieron durante operativos militares posteriores en el aeropuerto principal de la región.
Los medios citan hoy cifras que oscilan entre 13 y 19 muertos y recuerdan informes como el de la misión de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), que llegó a decir que eran 20 los campesinos muertos, aunque luego varios de ellos aparecieron con vida El enfrentamiento se produjo en medio de una ola de protestas contra el Gobierno de Evo Morales en las regiones bolivianas de mayoría opositora.
El Ejecutivo culpó por lo ocurrido al entonces prefecto de esa región, Leopoldo Fernández, quien está recluido desde el 19 de septiembre de 2008 en la cárcel de San Pedro de La Paz a la espera de juicio por su supuesta vinculación con los hechos.
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