Gobierno y oposición se culpan de distanciamiento para celebración

El presidente Evo Morales y el vicepresidente Alvaro García participaron en la población de El Villar de los festejos por el bicentenario del grito libertario en Sucre.

• No celebraron de forma conjunta el acontecimiento, porque las diferencias políticas pudieron más.

El Villar (Chuquisaca), (EL DIARIO y agencias).- Mientras el portavoz presidencial, Iván Canelas consideró ayer que faltó “mucha sinceridad” en la invitación de autoridades y cívicos de Sucre, para rendir homenaje al Bicentenario del grito libertario de América, por su parte, Aydée Nava, Alcaldesa y opositora al gobierno de Evo Morales, sostuvo que hizo todo lo posible por celebrar el Bicentenario junto a las autoridades del Gobierno, pero que las diferencias políticas pudieron más.

El portavoz presidencial precisó, en medio de la celebración del oficialismo en la población de El Villar, que todavía existen personas, dirigentes, autoridades a los que “les falta mucha sinceridad”.

Canelas aclaró que “los separatistas” no son las autoridades del Ejecutivo, porque si bien el presidente Evo Morales y el vicepresidente Álvaro García Linera no estuvieron en la ciudad de Sucre “se fueron con el pueblo” a El Villar, a 225 kilómetros de la ciudad, cuartel general del Ejército de José Manuel Ascencio Padilla y su esposa Juana Azurduy que enfrentaron durante 15 años a las huestes españolas.

“Nosotros celebramos en la tierra profunda, seguramente los pobladores de El Villar nunca se hubieran imaginado que a 200 años, las principales autoridades de Gobierno, embajadores, invitados especiales hubieran llegado a este lugar, precisamente donde se libraron las principales batallas de nuestra heroína Juana Azurduy de Padilla”, remarcó el portavoz presidencial.

En la ciudad de Sucre se cumplieron los actos programados por las autoridades del departamento entre los que resaltaron el Tedéum y el desfile cívico.

LA OPOSICIÓN

Entre los invitados estaban el ex vicepresidente Víctor Hugo Cárdenas, los prefectos de Santa Cruz, Rubén Costas y del Beni, Ernesto Suárez, el presidente del Senado, Oscar Ortiz, algunos senadores de la oposición, concejales y munícipes de Santa Cruz y el Beni, así como dirigentes cívicos.

La alcaldesa de la ciudad de Sucre, Aydée Nava, sobre la ausencia de autoridades del oficialismo indicó que hizo todo lo posible por celebrar el Bicentenario de la capital de Bolivia y de la revolución de América junto a éstas, pero que las diferencias políticas pudieron más.

“Hemos hecho todo lo posible para tener un festejo conjunto, hemos enviado reiteradas cartas a instancias gubernamentales, pero no nos dieron respuesta”, lamentó la burgomaestre, que presidió los actos cívicos en Sucre junto a la prefecta del departamento, Savina Cuéllar.

Nava, alineada con la oposición y distanciada del oficialismo, señaló que los “platos rotos” de la confrontación política entre el Gobierno y las autoridades y los dirigentes cívicos de Chuquisaca “los pagó el homenaje del Bicentenario del Grito Libertario”.

“Pero nosotros cumplimos, les invitamos (al Gobierno), y si no vinieron es una página volcada, la historia será la que juzgue”, consideró.

Por su parte la prefecta de Chuquisaca, Savina Cuéllar, junto a sus similares de Santa Cruz, Rubén Costas; Beni, Ernesto Suárez; y Tarija, Mario Cossío, criticó también la ausencia del presidente Evo Morales y sus autoridades, “por venganza política”.

“Otros países se unen para celebrarlo, y qué triste que el Gobierno hubiese optado por dividir a los bolivianos y agredir, agraviar a Sucre, pero el Presidente se fue a otro país al lado de Hugo Chávez; pero más allá, la historia queda y América Latina es independiente y soberana gracias a que aquí se dio el primer grito libertario”, dijo el jefe nacional de Podemos, Jorge Quiroga.

El prefecto de Beni, Ernesto Suárez, se unió a las críticas indicando que el Gobierno trató de desvirtuar la celebración del Bicentenario organizando otros actos paralelos en distintos lugares de Chuquisaca.

“El Presidente decide hacer un acto paralelo y no da la imagen que debía darla a nivel internacional, pero aquí queda al descubierto quién es el que separa y divide y busca las confrontaciones en el país. El Presidente no está donde debería estar”, dijo Suárez.

“Lamentamos que los mismos de siempre quieran dividir a Bolivia y quieran hacernos aparecer ahora que estamos desencontrados; lamento mucho que hayan querido aguar la fiesta que no es de Sucre ni de Chuquisaca, sino del primer grito libertario de toda nuestra América morena”, dijo a su turno el prefecto de Santa Cruz, Rubén Costas.

El presidente del Senado, Oscar Ortiz, también censuró la ausencia del Ejecutivo en las celebraciones cívicas y dijo que con ello se trató de empañar un festejo que debía servir “como punto de partida para la unidad de los bolivianos”.

“El Presidente debería estar aquí, esto debería haber sido la gran fiesta de todos y lamentablemente se ha visto quizás un poco disminuida por esta división que es culpa del Presidente, pero debemos seguir adelante con fe y esperanza siguiendo el ejemplo de nuestros patriotas”, concluyó.

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