Registro de electores supera previsiones en el país

Por Ap - Agencia -

Un hombre indígena se registra para las elecciones del próximo 6 de diciembre en una unidad móvil de empadronamiento en San Miguel del Bala, en la Amazonía boliviana.| Foto Archivo. - Efe   Agencia

Un hombre indígena se registra para las elecciones del próximo 6 de diciembre en una unidad móvil de empadronamiento en San Miguel del Bala, en la Amazonía boliviana.| Foto Archivo. - Efe Agencia

LA PAZ |

La cantidad de inscritos en los registros electores ya supera los 4 millones de votantes para las elecciones del 6 de diciembre, un récord que supera las previsiones, se informó el martes oficialmente.

Las inscripciones comenzaron el 1 de agosto y cerrarán el 15 de octubre. Hasta la noche del lunes se pasó los cuatro millones de inscritos, informó Luis Pereira, director del Padrón Biométrico, programa dependiente del Organo Electoral.

Inicialmente el organismo había proyectado 3,5 millones de inscritos y posteriormente elevó sus previsiones a 3,8 millones que eran los registrados en el padrón antiguo de este país de 10 millones de habitantes.

Las inscripciones también se realizan en Estados Unidos, España, Argentina y Brasil para los bolivianos residentes en esos países que por primera vez sufragarán, dijo Pereira.

Un nuevo padrón esta vez con fotografía y huellas dactilares (biométrico) de los ciudadanos fue la condición que impuso la oposición política para apoyar una ley electoral para los comicios de diciembre.

Los opositores argumentaron que el padrón anterior elaborado en forma manual en las últimas dos décadas no era confiable y permitía el fraude.

El 6 de diciembre los bolivianos elegirán a un presidente, un vicepresidente y renovarán la totalidad de la Asamblea Legislativa Plurinacional de 166 miembros.

Encuestas electorales perfilan a Morales como favorito pero también muestran un repunte del principal rival opositor de derecha Manfred Reyes Villa y del centrista Samuel Doria Medina.

Morales alienta un proyecto político izquierdista de reivindicación étnica y orientado al estatismo. Enfrenta una oposición conservadora que defiende un proyecto liberal, aspira a una autonomía para las regiones y cuestiona los que considera una línea autoritaria del mandatario, el primer indígena que gobierna Bolivia.

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