| El domingo, un contingente de 36 efectivos de la UTOP intentó recuperar el yacimiento de wólfram y estaño, tomado hace 17 meses. Todos los uniformados fueron heridos y cuatro permanecen internados en la clínica policial. | ||||
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“Hemos tenido que lamentar que policías, en todas sus jerarquías, han sido emboscados por un grupo de pobladores de la mina Himalaya y producto de ello varios han sido heridos”, dijo ayer el comandante General de la Policía, Víctor Hugo Escóbar, en el ingreso a la Clínica Virgen de Copacabana de la urbe paceña. A ese nosocomio llegaron para ser atendidos cerca de 40 efectivos de la Unidad Táctica de Operaciones Policiales (UTOP), según indicó a la Red ATB su director, Rolando González. No obstante, el comandante departamental, Édgar Revilla, afirmó a los medios que los 36 policías que participaron del operativo “fueron reducidos”. Uno de ellos, Óscar Condori Gómez, relató que aunque esperaban encontrarse con sólo 10 mineros, se toparon en el lugar con más de 100 personas provenientes de tres comunidades. “Lo único que hemos hecho era tratar de tranquilizarlos, pero ellos no querían y estaban tan alterados que lo único que querían era matarnos. Llovían las piedras, nos apaleaban, prácticamente nos han desequipado”, dijo el policía, según ATB. Condori llegó al centro médico cerca de las 3.00 de ayer y permanece internado junto con el subteniente Fernando Machicado Mendoza, Ernesto Arcaya Llanos y el capitán Javier Flores. De acuerdo con Escóbar, Arcaya conducía el bus en el que los uniformados llegaron a la mina. Fuentes gubernamentales revelaron a este medio que el operativo en la mina Himalaya —que produce actualmente wólfram y estaño— debía realizarse hace dos semanas, pero fue suspendido y realizado el domingo, por la mañana, sin el conocimiento del Ministerio de Minería. El yacimiento minero fue tomado por los campesinos del lugar el 26 de octubre del 2007. El domingo, los policías que fueron para recuperar la mina se vieron rodeados por personas que les apedrearon, golpearon y les arrebataron su equipo antimotines e incluso sus objetos personales. “Sustrajeron lo que es equipo, prendas, cosas personales como billeteras y celulares”, afirmó Machicado en entrevista con ATB. Tras la emboscada, tres de los uniformados no lograron escapar con el contingente y fueron lanzados al barranco y al río, de donde salieron caminando. Se trata del capitán Javier Flores, el teniente Romel López y el policía Germán Lima. Según fuentes policiales, los tres caminaron durante toda la noche y fueron rescatados ayer a las 10.00, cuando un acuerdo entre jefes policiales y comunarios permitió el ingreso de una ambulancia de la unidad de Bomberos. Las tres personas, consideradas previamente como desaparecidas, arribaron a la clínica policial a las 15.30, dado que el camino de retorno desde la mina toma entre cinco y seis horas. En la mañana, Luis Quispe, dirigente del cantón Cohoni —al que pertenece Cayimbaya—, denunció que el domingo los policías llegaron gritando y pateando puertas. “Por eso es que nosotros, que somos casi 500, nos hemos organizado y hemos reaccionado y bloqueado el camino”, dijo el campesino, según reportó ANF. “(...) parece que ellos no están acostumbrados a caminar en barrancos y por escaparse se han lastimado y se han botado al suelo. Ellos mismos han botado sus cascos”, complementó Quispe. Condori negó tales versiones. “¿Cómo vamos a entregar nuestras armas si son nuestros medios de defensa?”, cuestionó. Mientras, Asencio Choque, dirigente minero de Himalaya, denunció la desparición de su compañero, Édgar Zurita. González señaló anoche que Flores presentaba múltiples contusiones, que Machicado fue operado para reducirle una fractura de clavícula y que Arcaya estaba siendo examinado por un neurocirujano. Añadió que López y Lima fueron dados de alta. Hasta el cierre de la presente edición, no se conoció una versión oficial del Ministerio de Gobierno sobre lo ocurrido en Himalaya. Desde el Ministerio de Minería se informó que el reporte de ese despacho nunca llegó. Una fuente oficial dijo a La Razón que 200 policías se encuentran en el campamento próximo a la mina, donde se desarrolla una negociación con los comunarios. Extraoficialmente, se supo también de otra negociación en el Ministerio de Gobierno. Testimonios “No han llegado los refuerzos” “Está sumamente delicado de salud. Tiene la clavícula fracturada, tiene contusiones más abajo de la rodilla y también le han partido la ceja. Hasta su revólver de reglamento les han quitado, les han pegado con palos. Los comunarios dicen que los policías fueron a agredirlos, cuando ellos eran 500 y los policías eran sólo 36. Tenía que haber un refuerzo pero no ha llegado; el mayor Chuquimia que está en Planeamiento tenía que mandar polivalentes”. “Escaparon hacia el barranco” “Todo el cuerpo le duele, tiene fracturas y el rostro hinchado por las pedradas. Me ha dicho que (él y sus compañeros) han recibido golpes, palazos y que apenas escaparon hacia el barranco. También me ha contado que les han quitado todas sus pertenencias. No puede hablar mucho. El domingo en la mañana fue (a la mina Himalaya) y ayer, a las 3.00, lo han traído al hospital. Según me dijo, algunos comunarios estaban mareados y los golpearon sin asco porque eran pocos”. |
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