El Lyon aguanta y hace historia

Una prodigiosa mano de Hugo Lloris decidió a favor del Lyon el duelo francés de los cuartos de final de la Liga de Campeones. El Lyon había aguantado bien, tapando todos los huecos, defendiendo lejos de su área cada vez que fue posible. El Girondins empujaba, pero no veía la luz. No la ponía Gourcuff, ni Chamakh a pesar de su gol... El partido era más como quería el equipo de Puel, pero un gol metía a los bordeleses y dejaba fuera al verdugo del Madrid. En esas, a falta de cinco minutos, un centro desde la derecha cruzó todo el área hasta el segundo palo. Allí cabeceó Wendel con potencia y Lloris reaccionó en un alarde reflejos. Era la ocasión que había buscado el Girondins durante toda la segunda parte, pero en el momento decisivo la manopla de Lloris marcó la diferencia.

Antes de eso, el Lyon volvió a demostrar hechuras de un equipo serio. Se le minusvaloró desde el sorteo de octavos de final, pero se ha plantado en semifinales haciendo bien las cosas. En el Chaban-Delmas no se dejó avasallar de inicio y cogió las riendas del partido. Se esperaba un avalancha del Girondins desde el inicio pero no existió tal cosa. Se imponían Toulalan, Gonalons y Källstrom en el centro del campo, y Bastos amenazaba desde la izquierda. No había ocasiones, pero la sensación de peligro la ponía el Lyon. Un obús de Bastos y un cabezazo de Gomis sembraron inquietud entre la hinchada bordelesa.

El Girondins se fue arriba poco a poco. Un cabezazo de Gourcuff ante un centro que se comió Lloris pudo adelantar al campeón francés. Tras eso, el Girondins apretó algo más, aunque el Lyon era un muro muy bien plantado. Los mejores minutos de los bordeleses llegaron justo antes del descanso. Diarra mandó un disparo lejano al larguero y cuando aún resonaba la madera de Lloris, Chamakh hizo diana en la mejor jugada de los locales en todo el partido Trémoulinas combinó con Jussie, el lateral progresó hasta el área y su centro atrás lo terminaron metiendo entre Chamakh y Cissokho.

El Girondins no había hecho gran cosa, pero estaba a un gol de semifinales. La segunda mitad fue similar. El Girondins no creaba ocasiones y el Lyon controlaba bien, aunque tampoco amenazaba a Carrasso. El partido tenía emoción por tratarse de unos cuartos de final de la Liga de Campeones, pero no tenía fútbol. El Girondins no acreditó la fama de equipo que juega bien. Se lo impidió el Lyon con un buen trabajo. A pesar de todas las dificultades, los de Burdeos lo iban a tener en la cabeza de Sané y de Wendel. La de éste último, en el minuto 87, la sacó Lloris con una mano prodigiosa. La mano que mete al Lyon en semifinales de la Liga de Campeones por primera vez en su historia.

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