La crisis se ahonda en la F-1

MAX MOSLEY titular Federación Internacional de Automovilismo

El presidente de la FIA, Max Mosley ha comentado que tan solo intentaba hacer una broma cuando calificó a algunos miembros de la FOTA como 'loonies'. Con la enorme tensión que ya existe entre ambas partes, el Presidente de Toyota, John Howett, indicó que el comentario de Mosley había sido 'innecesario' y 'poco útil'.

Mosley también dijo que Flavio Briatore 'se veía como el nuevo Bernie' del campeonato paralelo, a lo que el jefe de Renault respondía que "nunca he pensado desde el punto de vista personal. Max debería dejar de insultar a la gente".

Según se ha sugerido, el calificativo de 'loonies' también iba dirigido al Presidente de Ferrari, Luca di Montezemolo: "Montezemolo y yo nos conocemos desde hace casi 40 años y tengo una buena relación con él a nivel personal," explicaba Mosley.

"Flavio es magnífico personalmente, pero obviamente cuando estás en algo tan complejo como la Fórmula Uno, es normal que haya desacuerdos en la forma en la que opera el deporte. Pero a nivel personal nos llevamos bien".

De hecho, Mosley explicó que ayer domingo viajó hasta el circuito de Silverstone en el helicóptero de Briatore.

El Presidente de la FIA insistía en que el apelativo de 'loonies' (lunáticos) iba referido a los miembros de la FOTA que se resisten a alcanzar una solución, y no a otros miembros de la asociación que "son más moderados y sí quieren negociar".

"Es más una broma que otra cosa. No creo que sean literalmente unos lunáticos, pero creo que no están siendo moderados en su postura", decía Mosley.

Se cree que las concesiones que empezó a hacer Max Mosley ayer en Silverstone, incluida la promesa de no emprender acciones legales contra Ferrari y la FOTA, y la sugerencia de que la paz estaba próxima, podría ser una reacción del británico a los rumores de que el próximo miércoles podría ser cesado de su cargo por el Consejo Mundial del Motor de la FIA.

Bernie Ecclestone, por su parte, confirmó esta desesperado por encontrar una solución a toda esta situación.

"He entregado 35 años de mi vida a la Fórmula Uno," decía Ecclestone, que tiene 78 años de edad. "Incluso mi matrimonio se acabó por culpa de la Fórmula Uno".

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