“El Retorno del Sol” dio bienvenida al año 5517 de la cultura aymara

Más de 30 mil visitantes asistieron a convocatoria de Alcaldesa

LOS OJOS DE GRAN PARTE DE LOS HABITANTES DEL MUNDO ESTUVIERON PUESTOS EN LA LLEGADA DEL SOL A TIWANAKU.

RITUAL SEGUIDO POR MILES DE ASISTENTES.

• No asistió Evo Morales, en su reemplazo ocuparon los sitiales de honor, Calixto Chipana, Ministro de Trabajo y Pablo Groux, Ministro de Culturas.

EL DIARIO Y AGENCIAS.- Una imponente ceremonia precedió a la recepción de los primeros rayos del sol sobre las ruinas de Tiwanaku ayer, marcando el ingreso del año 5517 de la cultura aymara, que en esta gestión tuvo el realce esperado por autoridades ediles de esta zona inminentemente turística que está a 72 kilómetros de la Sede de Gobierno.

Aunque no se contó con la presencia del primer mandatario del Estado Plurinacional, Evo Morales, como lo había anunciado, la joven autoridad edil de Tiwanaku, vio copadas sus expectativas porque experimentó que en su región estaban posados los ojos de gran parte de la humanidad, ya que el evento llegó vía internet a todos los confines del planeta Tierra.

“Ese es un gran logro para quien tiene una naciente carrera política”, decía la crítica sobre Eulogia Quispe la Alcaldesa de apenas 25 años, quien por su expresión, pareció restarle importancia a la ausencia del Primer Mandatario de origen indígena en Bolivia.

DETALLES

Los rayos del sol en las ruinas de la milenaria ciudad marcaron el inicio del Año Nuevo Aymara 5517, el denominado “Willkakuti” en lengua nativa, fue motivo de un festejo popular que se extendió desde la tarde del sábado hasta finalizar el domingo.

Decenas de caravanas de vehículos partieron desde La Paz hacia la ciudadela para participar de la tradicional fiesta indígena del solsticio de invierno en el hemisferio sur de la Tierra.

PROGRAMA

El programa festivo arrancó la tarde del sábado con una ofrenda a la Madre Tierra en el cerro denominado Qimsachata, luego se inauguró una Feria de Biodiversidad y Arte Popular seguido de una conferencia sobre la civilización andina dictada por investigadores arqueólogos y antropólogos de renombre internacional.

Finalmente, cerca de las 19.00 se dio inicio a la tradicional velada.

La explanada del templete semisubterráneo del Kalasasaya, en medio de las ruinas tiawanacotas fue el escenario donde miles de personas, entre bailes y cantos, soportaron el crudo frío invernal aguardando el evento astral de la madrugada de esta jornada.

Inicialmente se anunció la presencia del Primer Mandatario en el importante evento, sin embargo, el Jefe de Estado no se hizo presente, en su representación se pudo destacar la presencia del ministro de Culturas, Pablo Groux, y el ministro de Trabajo, Calixto Chipana, entre otros representantes gubernamentales.

APUNTES DESDE TIWANAKU

Aproximadamente a las 3.00 horas de ayer, motorizados particulares, minibuses públicos y el tren habilitado especialmente para esta oportunidad, llegaron hasta Tiwanaku más de 30 mil personas que esperaban la salida del sol.

Antecedió al “Retorno Sol” un festival musical con la presencia de destacados grupos musicales como Bonanza, Deszaire, Wiñay Phaxcha, Siempre Mayas, Solsticio y grupos autóctonos, además de la imponente presentación de la solista cruceña Gísela Santa Cruz.

La danza al son de los taquiraris interpretados por Gísela Santa Cruz y protagonizada por indígenas de Tiwanaku fue un hecho destacado por la primera autoridad edil del lugar, Eulogia Quispe, quien afirmó que “la cultura sobrepasa barreras ideológicas y une a la Nación”.

Una vez más, Canal 4, Sistema de Radio y Televisión Popular, cumplió excelente labor al efectuar una transmisión en directo del evento y que incluso llegó por la red de internet hasta los más lejanos confines del mundo.

Pese a la campaña de dotación de barbijos para prevenir posibles contagios de la influenza AH1N1, dada la masiva presencia de turistas, sólo un aproximado del 30 por ciento de los asistentes contaba con el mismo.

Avanzada la mañana, el cierre del evento se empañó por la excesiva presencia de ebrios, ya que escaseó el control sobre la venta de bebidas alcohólicas.

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