Una prueba de fuego

The Strongest pondrá a prueba su temperamento y un futuro hipotecado por la necesidad de sumar para alcanzar a los “chicos” disfrazados de de grandes que hoy son propietarios exclusivos de los sitios de privilegio en nuestro fútbol doméstico.

Lo que pasó el domingo, solo sirve para la anécdota, para alimentar sueños de grandeza, sueños de éxito, las sensaciones que despertaron pasiones en esos últimos 15 minutos frente a Blooming que para los hinchas serán inolvidables, seguirán alimentando su ego, y que además permiten futbolísticamente una suma de tres puntos que caen como un bálsamo para un juego complicado, que parecía lejana la posibilidad de ganarlo. Que Sandro Coelho vivió sus minutos de gloria como antaño, es también parte del pasado, el fútbol tiene la inmediatez de una revancha para los que triunfan puedan seguir por la senda, para los derrotados la posibilidad de una esperanza.

Este domingo se juega un clásico, un partido distinto, un partido que sirve para el que lo gane a veces hasta para salvar el año cuando los resultados no le terminan de acompañar.

Bolivar viene de caer en Santa Cruz frente a Oriente por la cuenta mínima, y deberá como primera necesidad alejar los pensamientos negativos y encontrar una fórmula para derrotar a su odiado rival. De los dos cuadros, los celestes de Tembladerani aportan la certeza que por lo exhibido hasta ahora cuentan con un mejor plantel, más numeroso, las diferencias de titular a suplente no son tan abismales como los de Achumani, tiene un equipo más estable, más ordenado, eso si más tacaño en su emotividad, The Strongest es lo opuesto, es más directo, es más frontal, cierto, con menos fútbol, pero cargado de presiones y pasiones.

A uno no le bastara con ser prolijo y desarrollar un juego mejor, al otro quizás no le alcance con el fervor o la garra que apareció en el último cotejo porque los clásicos son distintos, son emocionalmente diferentes, no importa la ubicación, no importa el puntaje, sólo los une el deseo y el interés de ganar a como de lugar, y a ello apuntan los dos grandes de La Paz, así es que amigos del fútbol, a partir de hoy corren apuestas, conjeturas, análisis porque en el fondo todos somos aficionados a esto que es tan hermoso, nuestro fútbol, nuestra pasión tan dificil a veces de entenderla y tan facil de disfrutarla.

Bolívar, retornó pasado el medio día de ayer, desde Santa Cruz, volverá a las prácticas hoy a partir de las 10.00. después de la derrota que sufrieron frente a Oriente Petrolero, y que los marginó de la punta a la que aspiraban el fin de semana. Para este cotejo, no tienen jugadores suspendidos, no existen, los que padezcan de lesiones graves, si algunos golpeados que serán evaluados esta mañana por el cuerpo médico del plantel.

El trabajo que tienen preparado para esta jornada es enteramente físico, y recién el miércoles, al igual que su odiado rival, comenzarán el trabajo con balón en espacios reducidos y dominio del esférico.

Gustavo Quinteros, director técnico del plantel, aseguró que no siempre se juega bien, a diferencia de los anteriores partidos en los que a pesar de haber sido derrotados, sostuvo que su equipo fue siempre superior, “no siempre se va a jugar bien, Oriente fue superior y hay que reconocerlo, nosotros no estuvimos lo suficientemente concentrados para conseguir al menos un empate y estas son las consecuencias, ahora lo importantes es preparar el clásico, porque siempre es un partido distinto, con otra tónica, no es un encuentro común, y sí o sí hay que ganarlo”, comentó Quinteros.

Los dos puntos que les separan a los equipos paceños, hacen que tanto Bolívar como The Strongest, intenten salir a buscar la victoria, el primero para acercarse más a los punteros, y el segundo para rebasar a su tradicional rival y a la vez escapar un poco al fantasma del descenso.

The Strongest, gozó de un día de descanso después de su victoria ante Blooming el pasado domingo, recién hoy retomarán las prácticas en el estadio Rafael Mendoza Castellón con una jornada de trabajo dedicada a la labor física, y desde mañana comenzarán con el trabajo de manejo de balón preparando el clásico de este domingo.

Para ese cotejo, estarán disponibles los jugadores Damián Grosso y Rosauro Rivero que ya cumplieron sus partidos de suspensión, sin embargo, Julio César Toresani, director técnico del plantel no presentaría modificaciones al plantel, porque empieza a creer en la frase de “equipo ganador no se toca”.

Podría existir una duda en el esquema la de Wílder Arévalo que en el partido anterior sufrió una molestia en la rodilla y por ese motivo fue sustituido, para evitar complicaciones por esa dolencia. Recién hoy en la mañana conoceremos la certeza de su condición. El panorama aparece sin nubarones para encarar el clásico, para llevar adelante un trabajo sin contratiempos. Si bien la necesidad de sumar puntos continúa, porque el equipo todavía está de mitad de tabla para abajo, se ubica en el octavo lugar el tener como antecedente inmediato una victoria es una gran motivación.

“No es lo mismo preparar un partido con una derrota como antecedente, porque eso representa una presión para recuperar puntos. El venir de un triunfo motiva bastante y eso hace además que el trabajo sea más llevadero, aunque siempre nos esforzamos y sacrificamos para aportar al equipo”, dijo Sandro Coelho, defensor del plantel.

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